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sábado, 30 de marzo de 2019

Mivtza Yom Huledet - LA FUERZA DE UNA TORTA DE CUMPLEAÑOS


Han pasado más de 30 años desde el comienzo de la Mivtza Yom Huledet que el Rebe lanzó el día del cumpleaños de la Rebetzn Jaya Mushka, el 25 de Adar 5748, aproximadamente un mes después de su fallecimiento.  Esta campaña ha acercado a miles a Torá y Mitzvot gracias a los Shlujim que marcan y recuerdan los cumpleaños de sus mekuravim.


Una noche, una pareja israelí en Kibbutz Tzivon, al norte del país, estaba sentada frente a su televisor, teniendo previsto pasar el tiempo hasta la hora de acostarse.

Tocan de repente en la puerta. El marido se levantó de su sillón y se dirigió a la puerta, aunque no recordaba que nadie le dijera que venía. En el kibutz, nadie golpea así por la noche. Para su sorpresa, ve un par de "dosim" (despectivo para las personas religiosas) en su puerta, con grandes sonrisas y una torta.

"¡Mazal tov!", Exclaman. "Mazal tov por tu cumpleaños, ¡¿Qué... lo has olvidado?

El señor israelí se queda allí con la boca abierta. Gente religiosa... con una torta de cumpleaños... una gran sonrisa... kibutz ... El 'invitado' no se hace esperar. Extiende su mano y la sacude cálidamente. “Vinimos a celebrar tu cumpleaños. Es un gran día ¿Podemos sentarnos unos minutos?"

Sin decir una palabra, el hombre aturdido abre la puerta y se dirige hacia el sofá. Su esposa sale de la cocina, sosteniendo una toalla. Sus ojos quedan abiertos de par en par con asombro ante los invitados inesperados. Cuando se recupera un poco, comenta: "¿Cómo sabían que era su cumpleaños?"

La pareja se sienta y comienza allí un farbrenguen.

Esta situación no es producto de la imaginación del autor de esta nota; Realmente ha sucedido, miles de veces. Parejas Lubavitcher y Shlujim visitan las casas de los mekuravim (algunos de los cuales aún no saben que son mekuravim) para celebrar sus cumpleaños con ellos. El cumpleaños es la excusa para un Jasidishe farbrenguen espontáneo, una oportunidad para hablar sobre judaísmo y la neshamá, y ​​para conectar al celebrante y su familia con el Rebe.

Esta es una perspectiva; Un vistazo a la Mivtza Yom Huledet, una de las sagradas campañas que el Rebe lanzó a lo largo de los años para acercar a los judíos a su Creador y al judaísmo.



*) Por Menajem Zigelbaum, para 'Beis Moshiaj'


¿CÓMO COMENZÓ LA CAMPAÑA?


Volvamos 30 años atrás al 25 de Adar, 5748. El período de duelo de Shloishim por la Rebetzn había terminado. El Rebe se quedó en su casa y ahí es donde se llevaron a cabo las Tefilot y la labor sagrada del Rebe.

Esa mañana, a las diez en punto, el Rebe bajó del segundo piso para Shajarit que tendría lugar en el primer piso de su casa. Cuando terminó el Davenen, el Rebe subió a su habitación en el segundo piso, mientras que las personas en la planta baja comenzaron a doblar sus Talis y Tefilin. En unos pocos minutos, la casa que estuvo cerrada por 40 años para los Jasidim, se vaciaría y regresaría a su estado de tranquilidad habitual.

De repente, se vio al Rebe bajando las escaleras una vez más. ¡Qué sorpresa! El Rebe fue directamente al shtender (atril) de Davenen y comenzó a decir una Sijá que se transmitió a 770. Nadie recordaba cuándo fue la última vez que el Rebe dijo una Sijá por la mañana. La Sijá comenzó con la revelación de un hecho sorprendente y previamente desconocido: ese día, el 25 de Adar, era el cumpleaños de la Rebbetzn. El Rebe no se limitó a simplemente mencionar este dato, sino que (señalando que esto era un mérito e ilui para su Neshamá) hizo una sugerencia relacionada a las prácticas que todos deberían realizar en un cumpleaños, hombres, mujeres, y niños:

“Que cada persona realice un alegre farbrenguen en su cumpleaños junto a los miembros de su familia o también sus amigos, etc. para que el compromiso que tome con las buenas resoluciones (bli neder) en su cumpleaños (cuando 'el mazal está dominante') se haga de una manera alegre; al hacerlo así se añadirá al cumplimiento de las buenas resoluciones la simjá y Jayus."

El Rebe continuó hablando sobre la particularidad de este día en el cual el mazal de una persona es ascendente, y destacó las palabras del Rebe Rayatz, enfatizando cómo había revelado al mundo cosas que en el pasado solo eran conocidas por individuos especiales (como ser la celebración de los cumpleaños). El Rebe reiteró acerca de los farbrenguens que debían hacerse en este día: "Sería muy meritorio y correcto que cada uno haga un farbrenguen alegre en su cumpleaños junto a su familia o también sus amigos."

A lo largo del año que siguió, el Rebe agregó y puso énfasis a las conductas y prácticas a realizarse en un cumpleaños. Por ejemplo, en el farbrenguen que tuvo lugar en Ajaron shel Pesaj, el Rebe estableció las diez prácticas que deben realizarse en este día, tanto sea el cumpleaños de un "niño" o una "niña".

En esa Sijá, el Rebe incluso refutó los argumentos de aquellos que se opusieron a la campaña de cumpleaños con el argumento de que el único lugar en la Torá donde se menciona un cumpleaños es respecto al Faraón. Llegaron a la conclusión con eso de que no deberíamos marcar este día de alguna manera especial. El Rebe descartó esto diciendo: "Incluso si hasta ahora, esto no era practicado o conocido... es como varios otros asuntos de Torá y Mitzvot que se revelaron en sus momentos (y épocas) particulares. Especialmente los asuntos de divrei sofrim (palabras de los Sabios) y costumbres judías, etc., que fueron revelados (posteriormente) por el "estudiante veterano", etc., y varias decenas de yehudim ya se están comportando de esta manera durante años, y en este caso, cuando ya ha sido adoptada (esta costumbre) por muchos yehudim y su número está aumentando."

Los Jasidim pronto se dieron cuenta de que se trataba de otra mivtza, "Mivtza Yom Huledet". La sijá fue editada más tarde por el Rebe.



30.000 PERSONAS EN HERTZLIA


A lo largo de los años, muchos de los Shlujim comenzaron a promocionar esta campaña de cumpleaños. Uno pensaría que no hay una mivtza tan fácil y agradable como esta, de celebrar un cumpleaños. Cada persona tiene un camino hacia su corazón y solo necesitas encontrar la llave correcta para abrir incluso las puertas más pesadas. Mivtza Yom Huledet cumple con este criterio. ¿Quién no quiere celebrar su cumpleaños?

Sin embargo, mientras que el mundo celebra con una torta y velas, Jsidim Jabad celebran con farbrenguens y regalos para el Rebe y Di-s en términos de buenas resoluciones. La llave sigue siendo la misma llave, una fiesta de cumpleaños.

El rabino Isroel Halperin, Shliaj en Hertzlia, relata:

“El Beit Jabad de Hertzlia fue uno de los pioneros en Mivtza Yom Huledet. Enviamos saludos de cumpleaños a las personas que figuran en nuestras listas. El Rebe incluso revisó el contenido de la carta y nos dijo que agregáramos dos líneas. Hoy, enviamos cartas de buenos deseos y bendiciones a aquellos que cumplen años, con la fecha exacta del cumpleaños hebreo, a más de 30.000 personas en Hertzlia. Sugerimos allí que conmemoren el día en una manera judía/jasídica."



CAUTIVANDO CORAZONES


Uno de los Shlujim que pone mucho trabajo en Mivtza Yom Huledet es el rabino Yaakov Tzvi (Kobi) Ben Ari, Shliaj a los Kibutzim. Su trabajo se extiende a cientos de Kibutzim en el norte y sur del país. Como antiguo kibutznik, del kibutz Maayan Tzvi en el Carmel, conoce bien a los kibutznikim. Pone mucho esfuerzo para derribar los gruesos muros que los kibutznikim han construido entre ellos y el judaísmo.

“En los primeros días de trabajo y activismo en los kibutzim, me encontré con un problema a la hora de mantener contacto con las personas con las que había interactuado. Al principio, les envié por correo material de lectura sobre el judaísmo. Cuando Pesaj se acercaba, entregaba Matza Shmura a todas las familias que conocí. Después de un tiempo, vi que esto no funcionaba y busqué formas de fortalecer el vínculo.

“En una de mis visitas a Tzaj, me encontré con un folleto de Mivtza Yom Huledet dirigido por aquel tiempo por el mashpia, el rabino Levi Itzjok Ginsburg de Kfar Jabad. Realmente me gustó la idea y pensé que podría ser una buena manera de mantener el contacto.

“Todas las noches llamaba a las personas con las que me había contactado y preguntaba cuándo era su fecha de cumpleaños. La mayoría de ellos, para mi sorpresa, no sabían la fecha judía. Tomé la fecha civil y descubrí la fecha judía.

“Después de que hice una lista, hice que una pareja Lubavitcher hiciera llamadas, él a los hombres y ella a las mujeres. Les recordaban a las personas a las que llamaban su cumpleaños. Aprovechaban la emoción que la gente sentía entonces, y de una manera agradable, compartían la horaá del Rebe de observar prácticas especiales en este día y tomar buenas decisiones en Torá y Mitzvot.

“A lo largo de los años, mi lista de contactos creció a pasos agigantados; pasó de cientos a miles. Llamar a cada uno era imposible, así que conseguí un artista gráfico que diseñara un hermoso certificado de cumpleaños, donde incluya el capítulo de Tehilim de cada destinatario y el capítulo del Rebe, además de las instrucciones del Rebe para lo que debe hacerse en un cumpleaños. Me ocupé de que aparezcan las instrucciones escritas en un lenguaje sencillo junto con palabras de bendición. Laminamos el certificado por lo que se veía muy bien.

"Las reacciones de la gente fueron entusiastas. Más tarde, cuando visité a las personas a las que les había enviado el certificado, vi los certificados colgando con orgullo en la pared.

"Es una manera fabulosa que gana la gente. Cuando alguien recibe un hermoso certificado en su cumpleaños, recordándole cómo se ve este día en el judaísmo, no hay duda de que generará algún despertar interno, incluso si no siempre lo percibe en el corto plazo inmediato.

“Hay una persona mayor que vive en un kibutz en el sur. Cada vez que lo visito, me cuenta con orgullo sobre su progreso en el judaísmo. Y todo comenzó gracias al certificado que se le envía regularmente en su cumpleaños."



El poder de una llamada telefónica


El rabino Shneur Harel es uno de los activistas que dedica mucho tiempo a esta mivtza. Tiene a su cargo talleres (Workshops) sobre cómo impartir el significado de las festividades judías, que fundó su padre, R’ Shmarya. R''Shneur trabaja en trece kibutzim en el área de Natzrat Ilit.

Tiene muchas historias sobre Mivtza Yom Huledet. Nos contó esta, que sucedió para la época de Purim.

“Aproximadamente dos semanas antes de Purim, tomé una lista de los cumpleaños de las personas en mi área y comencé a llamarlas, con la esperanza de que algunos de ellos estuvieran dispuestos a venir a hacer un Farbrenguen ese día. En el pasado, simplemente nos dirigíamos y aparecíamos, pero con el tiempo, surgió la necesidad de arreglos previos. Hacía las llamadas para recordarles a las personas su cumpleaños, y la gente estaba muy emocionada. Por supuesto, les recordaba la importancia del día y las costumbres.

“Una de las llamadas fue a una mujer en Kibutz Gvat, una partera por profesión. Me presenté y mencioné el cumpleaños de su hijo. Ella estaba feliz y me agradeció por las bendiciones y los buenos deseos. Como siempre, mencioné las costumbres del día. Antes de colgar, me detuvo y me dijo: 'Quiero que vengas a revisar mis mezuzot'. Viniendo de una kibutznik, esto era definitivamente emocionante. Yo estaba feliz por la oportunidad y coordinamos un tiempo.

“Fui a su casa y quité las mezuzot para verificar. Luego me dijo: 'Shneur, no lo vas a creer... Esta semana, pensé revisar mis mezuzot, pero no sabía a quién recurrir. ¡Entonces fue que me llamaste! "Estoy seguro de que este no es el fin de la historia con ella y habrá otros desarrollos positivos."

R'Shneur agregó: "Ese día, llamé a un hombre llamado Eli, residente del Kibutz Hazorea. Nunca habíamos hablado antes. "Eli, mazal tov". "Mazal tov? ¿Por qué? 'Preguntó." Tu hijo cumple años hoy", le dije. Comenzamos una conversación y sugerí que viniera a hacer un farbrenguen en honor al día. El aceptó.

"Pensó un momento y luego dijo: 'No puedo hacerlo el jueves porque tengo un evento y tampoco puedo hacerlo el viernes porque estaré en el hospital'. Le pregunté qué sucedió. . Dijo que tenía que pasar una operación. Le dije: "Si es así, tenemos que encontrarnos para que puedas escribir al Rebe de antemano y pedirle una brajá!"

"Para mi sorpresa, él estuvo de acuerdo. Debe tenerse en cuenta que estamos hablando de kibbutznikim que son tercos y para nada religiosos. Shlujim que trabajan en grandes ciudades israelíes, les resultará difícil comprender lo difícil que es conseguir que una persona así le escriba al Rebe.

"Quedamos en reunirnos el viernes a las 2:00, pero luego recordó un servicio conmemorativo al que tenía que asistir. Luego sugirió, ¿por qué no me sumaba con él? Me dijo que, 12 años atrás, había ocurrido un terrible accidente automovilístico cerca del Kibutz Hazorea en el que una pareja y su hija habían fallecido. Desde entonces, amigos cercanos se reúnen cada año en la montaña, justo encima de donde ocurrió el accidente. Por supuesto, me dio gusto tener la oportunidad de reunirme y conocer a otros kibbutznikim y compartir algún Divrei Torá.

“Me reuní con Eli poco antes del servicio, y él escribió al Rebe; luego abrió una respuesta que trataba respecto al bitajón en Hashem y sobre pensar palabras de divrei Torá. El Rebe también decía que revisara los Tefilín y las Mezuzot y que asistiera a un farbrenguen jasídico. Le dije: 'Eli, ¿hay algo de Torá que sepas?' Él dijo: 'Sí, sé el Shemá Israel'. Le dije: 'Genial, repasa ese versículo de vez en cuando'. En cuanto a revisar tefilín y mezuzot, no tenía tefilín y quedamos en revisar sus mezuzot pronto. Baruj Hashem, la operación salió muy bien.

“Cuando él mismo me pidió que le pusiera tefilín, me di cuenta de que había experimentado un despertar espiritual.

“Mientras tanto, habían comenzado a reunirse para el servicio conmemorativo. El más viejo del grupo, un kibutznik de unos 70 años de edad, dijo con lágrimas en los ojos: "Nos hemos reunido aquí para conmemorar su día de conmemoración. Quisiéramos, Shneur, que digas algunas palabras de Torá l’ilui nishmatam." ¿¡Quién hubiera creído que un anciano kibutznik diría tal cosa?! ¡Esto es mamash Gueulá!

“Hablé un poco sobre la neshamá y los méritos de la neshamá, y ​​sobre la elevación del alma, y ​​estaban muy conmovidos. Luego vino otra sorpresa: cuando uno de ellos pidió permiso para decir el Kadish y pidió que también fuera para la elevación de las almas de sus padres, ya que nunca había dicho el Kadish por ellos.

"Y todo esto fue gracias a Mivtza Yom Huledet".



El contacto personal


El cuñado de R'Shneur Harel es el rabino Dor Bitton. Poco después de casarse, él y su esposa Miriam comenzaron a trabajar en Mivtza Yom Huledet, como parte de su alcance a los kibutzim.

"El rabino Ben Ari nos dijo que hay lugares donde no permiten la religión en su puerta, pero creó un formato interesante. No venimos a hablar de religión; Venimos a decir mazal tov en un cumpleaños. Puedes creer que funcionó? Parece que la gente se conmueve al descubrir que alguien recuerda su cumpleaños, incluso si nunca se hayan conocido antes.

"¿Como funciona? Hay personas que se inscribieron en la lista, algunas proporcionan nombres de amigos y vamos con una sonrisa y un kit de cumpleaños. No llamamos antes. Nos presentamos y preguntamos dónde vive tal y tal y tocamos la puerta."

La joven pareja dudó inicialmente en tomar el proyecto, pero terminó aceptando el shlijus. De un proyecto "temeroso" se convirtió en una divertida experiencia de unión como pareja. Viajan, conocen nuevas personas, estilos desconocidos y vuelven con muchas historias. Cada uno de estos viajes es una historia. La historia no siempre es conmovedora, pero siempre hay una historia.

La Sra. Bitton dice: “Aunque nos vestimos de manera diferente, hay mucha conexión entre nosotros y ellos. Solo tienes que hacer la conexión inicial, que en nuestro caso es un cumpleaños, y continúa desde allí. Hablar con alguien sobre su cumpleaños es una idea ingeniosa; Llegas a la persona en el nivel más personal. ¡Se derrite inmediatamente! La gente pregunta, '¡¿Qué ?! ¿Viniste por mí? ¿Por mi cumpleaños? ¿De Verdad? ¿Cómo llegaste a mí? Y luego seguimos hablando.

"A menudo sucede que decimos que venimos debido al cumpleaños y la persona dice: 'Se confundieron. Fue hace una semana, o en unos pocos días". Es una excelente oportunidad para explicar el cumpleaños de un judío y la calidad especial del día. Hemos tenido tantas anécdotas... "

Una vez, la pareja de Bitton fue a un kibutz a la casa de una familia cuyo nieto había sufrido un ataque de un animal salvaje. Estuvo en coma durante un mes. Al principio, él estaba en un hospital y luego fue trasladado a Beit Levenstein, pero cuando vieron que no había progreso, le dijeron a la familia que lo estaban trasladando a una unidad geriátrica donde se quedaría hasta el final de su vida. Esto fue en Januka, y los Bitton se presentaron en la casa de los abuelos. Al ver a los Bitton, se entusiasmaron y llamaron al padre del niño lesionado y lo invitaron. Encendió una menorá y habló sobre su hijo.

La Sra. Bitton cuenta: "Le dijimos: 'Escribamos al Rebe y usted debe tomar una buena resolución'. Se comprometió a ponerse tefilín una vez a la semana. En la carta del Rebe decía, "simjá poretzet geder" (la alegría rompe las barreras). Encendimos la música y los hombres se pusieron a bailar. La alegría realmente rompió todos los límites, porque al día siguiente, el niño se despertó. Esta familia habla constantemente del milagro. El niño se recuperó por completo y está caminando, hablando y trabajando como cualquier otra persona.

“Hay muchas otras historias de milagros. Vemos al Rebe y los milagros que realiza todo el tiempo. Lo sorprendente es que estas son personas que no están relacionados con Rabanim o Tefilot, por lo que aparentan, pero tienen un cálido sentimiento por el judaísmo que no ves en ningún otro lugar.

“Una vez fuimos al Kibbutz Afikim. Había un guardia ruso en la puerta que no nos dejó entrar debido a las reglas, pero accedió a ponerse tefilín. Luego quiso rezar el Shmone Esre con los tefilín. Por supuesto, mi esposo aceptó, y el guardia se quedó haciendo davenen durante media hora. Observaba su Davenen y era algo increíble. ¡Un judío que parecía tan distante, haciendo un Davenen con tanta kavaná!

Los Bitton's declaran, desde su experiencia, que este formato se puede utilizar en cualquier lugar, en cualquier ciudad, vecindario o Moshav. "Solo preséntate, siéntate y habla con la persona sobre algo personal, es decir, su cumpleaños, una simjá en la familia o cualquier otra cosa que sea relevante. Necesitas encontrar a estas personas y encontrar el área que les interese, y desde allí, la conexión continuará. Los costos de esta mivtza son mínimos; La satisfacción es enorme."



ENCUENTRO EN BANGKOK


R’ Yaakov Tzvi Ben Ari relata:

Hace unos años, pasé tres días en Bangkok. Mientras estuve allí, decidí salir y buscar, conocer turistas israelíes. Fui a la famosa calle principal de la ciudad y caminaba por ahí. De repente, noté a un grupo de no-judíos vendiendo bichos y varias criaturas.

Iba a irme pero luego encontré un par de israelíes. Me acerqué a ellos y les dije hola, ¿cómo están? Cuando intercambiamos saludos corteses, les pregunté de dónde eran. La más joven dijo que vive en el Kibbutz Ein HaShofet en el norte.

La conversación continuó y, de paso, le dije que conocía a algunas personas de ese kibutz. Ella me preguntó a quién conocía y le nombré a Batia Reznik como ejemplo. Ella sonrió y me dijo: "Ella es mi madre". Ahora fue mi turno de sorprenderla y le pregunté si recordaba de dónde me conocía. Pensó un poco y dijo: "¿Un minuto, eres tú quien me enviaba un certificado cuando era mi cumpleaños?" Cuando le dije que sí, se emocionó mucho y dijo que los tiene colgados en su habitación y que a veces lee su capítulo de T'ehilim de allí!"




miércoles, 27 de marzo de 2019

21 de Adar: R Elimelej Milizensk - Maise: Un par de Tefilin muy especial



Reb Zushe y su hermano Reb Elimelej viajaban a menudo juntos, y Reb Zushe solía ir vestido como un simple judío, mientras que Reb Elimelej iba vestido como un Tzadik. Uno de sus principales objetivos era despertar a los yehudim a que hagan Teshuvá. Sin embargo, tenían sumo cuidado de no avergonzar a otro judío e informarle que a través de su ruaj hakodesh percibían que él había pecado y debían arrepentirse.

Más bien, Reb Zushe le hacía creer que él mismo se había dado cuenta de haber cometido ese pecado en particular, y se lamentaba de lo terrible que es para un judío haberlo hecho. Unos minutos más tarde, iba al tzadik, Reb Elimelej, y con lágrimas en los ojos, le rogaba que lo ayudara a hacer teshuvá.

Hablaba lo suficientemente fuerte como para que la persona a la que estaban interesados de influir esto lo inspirara y despertara en él sentimientos de arrepentimiento y teshuvá, diciéndose a sí mismo: "Yo también tengo esa falta o defecto". Luego escuchaba con gran interés lo que el Tzadik le decía a esta persona.

Al escuchar las palabras de aliento de Reb Elimelej, de que Hashem está listo y dispuesto a perdonar a alguien que se arrepiente sinceramente, hacía reflexionar a la persona, tal vez yo también debería arrepentirme. Sin embargo, dudaba en decir algo, temiendo que el camino del arrepentimiento fuera demasiado difícil para él.

Pero cuando escuchó cómo el Tzadik que también hablaba lo suficientemente fuerte como para que él lo escuchara, le mostraba a este "pecador" cómo arrepentirse y corregir sus malas acciones, pensaba, 'eso no es tan difícil; yo también puedo y debo arrepentirme.' Luego venía al tzadik y confesaba sus pecados.


La siguiente es una de esas historias maravillosas:


En una posada, Reb Zushe comenzó a lamentarse y le dijo a Reb Elimelej: 'Oy vey, mis Tefilín están Posul. Siempre pensé que mi padre, de bendita memoria, me había comprado un hermoso par de tefilín, que duraría toda la vida, así que nunca los revisé. Hoy conocí a un sofer (escriba) que se ofreció a chequearlos por mí, así que se los di a él.'

Pero cuando el sofer abrió las cajas frente a mí, me horroricé, las cajas estaban completamente vacías y no había nada dentro. Eso significa que no me puse tefilín en toda la vida y todos estos años, cuando dije una bendición sobre ellos, mencioné el santo nombre de Hashem en vano. Rebe, ayúdeme! ¿Cómo puedo corregir esto? Imagínate a un yehudi que tiene más de cincuenta años y nunca se puso tefilín. ¡Me siento muy mal, terrible! ¿Cuántas brajot levatalá (bendiciones dichas en vano), he pronunciado? ¡Oy Rebe, sálveme! Y con eso Reb Zushe estalló en un profundo llanto.

Reb Elimelej le habló con dulzura y él comenzó a calmarse. Luego le dijo: yo también soy Sofer, y te escribiré un par de tefilín esta noche, para que puedas ponértelos mañana por la mañana.

Reb Zushe le agradeció al tzaddik y se fue.

Al escuchar esta conversación, el posadero se apresuró hacia Reb Elimelej y le dijo: Rebe, nunca supe que uno tiene que revisar su Tefilín. Así que ya hace unos cincuenta años que mis tefilín no fueron revisados. ¿Puede por favor revisar los míos?

Sí, por supuesto respondió Reb Elimelej. Será un honor para mí revisar el Tefilín de un Yehudi. Por favor tráemelos ahora.

El posadero le agradeció y se fue apresuradamente a traer sus tefilín. Unos momentos después, los entregó y observó con asombro cómo Reb Elimelej los abría.

Sin embargo, un momento después su expresión se convirtió en horror; mientras Reb Elimelej le mostraba que la primera caja estaba completamente vacía y luego la segunda también estaba vacía.

Recordando la conversación que acaba de escuchar, dijo; "¿Rebe, significa esto que nunca me puse Tefillin en toda mi vida? Luego estalló en un doloroso llanto.

Reb Elimelej le explicó la gravedad de la transgresión, pero agregó en un tono reconfortante: "dado que no fue intencional y que eres sincero en tu arrepentimiento, las puertas del arrepentimiento están abiertas para ti".

Luego dijo: “Te escribiré un nuevo par de tefilín. Tendré en mente corregir y compensar todos los días y años que has perdido sin querer. Además, como parte de tu arrepentimiento, debes hacer lo siguiente.” Luego le indicó lo que tenía que hacer.

El posadero estaba muy agradecido y aliviado. Prometió hacer todo lo que el Tzadik le ordenara hacer.

Reb Elimelej sacó un poco de pergamino, tinta y una pluma y escribió un par de tefilín esa misma noche. Para felicidad y dicha del posadero, estaban listos a la mañana siguiente, y después de ver a Reb Elimelej insertándolos y cosiendo las cajas, se los colocó alegremente.

Misión cumplida, Reb Zushe y Reb Elimelej continuaron sus viajes para ayudar a otro judío.

Poco después el posadero falleció. Dado que la familia era pobre y no podían pagar todos los gastos a la jevra kadisha (sociedad de entierro), la costumbre de esa ciudad era que la jevra kadisha tomaban los tefilín de la persona y trataban de venderlos.

Sin saber que estos tefilín fueron escritos por el tzadik, Reb Elimelej lo colocaron junto con todos los otros pares que habían acumulado.

Pasaron algunos años y el tzadik Reb Levi Itzjok de Berditchov llegó a esa ciudad. Por la mañana se dio cuenta de que su alumno y asistente que estaba encargado de traer su Talis y Tefillin olvidó de hacerlo. Esto lo angustió mucho. ¿Qué iba a ponerse esa mañana?

Mientras que todos sus estudiantes estaban más que dispuestos a tener el honor de que el Tzadik usara sus Tefilín, Reb Levi Itzjok no quiso pedir prestado el par de nadie. Deseaba usar un par que fuera suyo.

Uno de los estudiantes mencionó el hecho de que en varias comunidades la Jevra Kadisha tienen tefilín de gente fallecida para la venta, como pago por sus servicios. Él sugirió que pregunten en la Jevra Kadisha si tienen un par a la venta.

Cuando la Jevra Kadisha  respondió afirmativamente, y les informó que tenían algunas pares; Reb Levi Itzjok dijo que le gustaría ir personalmente y elegir él el par que desea.

Cuando llegó Reb Levi Itzjok, el gabai de la Jevra Kadisha le mostró unos cuantos pares de tefilín y le informó que están disponibles por el mismo precio.

Para sorpresa y asombro de todos, Reb Levi Itzchok comenzó a mover respetuosamente algunas pares a un costado y luego tomó uno con una tremenda felicidad. "¡Elijo este!", exclamó.

El Gabai se dio cuenta de que debía haber algo especial y significativo en ese par de tefilín en particular y deseaba entender qué era. Asi que le dijo; "Honorable Rabino, nuestra costumbre es venderlos todos a un mismo precio, de forma justa. Sin embargo, obviamente este par debe ser muy especial y, por lo tanto, se podría haber vendido a un precio más alto. Todo lo que tengo que decir es que el mismo Tzadik de Berditchov lo eligió y la gente con gusto nos pagaría un precio muy alto. Sin embargo, se lo daré si me explica por qué es que eligió este específicamente.

Reb Levi Itzjok pasó a relatar la historia mencionada anteriormente, exclamando: "¿ahora entienden!"


En honor al Yortzait del Tzadik R' Elimelej Milizensk, 21 de Adar.

martes, 26 de marzo de 2019

Snapshots - Anécdotas cortas con el Rebe - Davenen y el Shul 2

Número 2
Las palabras del Davenen



En la carta pública de Erev Pesaj 5724 (1964), el Rebe rechaza el estilo en que las personas quieren hacer grandes cambios en sus vidas, sin entender que las cosas pequeñas y triviales son las que hacen a la persona.
Un ejemplo que da el Rebe allí es: "Ser cauteloso de no tragar palabras en el Davenen."
HaRav Jodakov contó:
Una vez el Rebe me llamó y me dijo: "Hay un niño que hace Davenen en nuestro minien en 770, y parece que se saltea las palabras en su davenen. Por favor, asegúrate de que hablen con él al respecto."
Reb Leibel Groner relató un incidente similar:
Durante Janucá 5742 (1981), el Rebe hizo Davenen abajo, en el shul grande. En medio del Davenen, el Rebe se dio vuelta varias veces, mirando a los niños y diciendo "Omein" más fuerte de lo usual.
Unos días después, el Rebe me dijo: "Hace ya tres días que veo que un niño no responde "Amén" correctamente. Hay adultos que están parados ahí junto a él, pero no hacen nada al respecto. Quería acercarme yo mismo a él, pero eso hubiera creado un alboroto."
(Hajinuj Vehamejanej, p. 62)

lunes, 25 de marzo de 2019

En Continuación con el Maise del Davenen de R Biniomin Kletzker


Hoy no trabajo

Por R. Sholom Avtzon


Mis padres se establecieron en Detroit, Michigan, en 5714 (1953). En aquella época, muchos Rabanim prominentes llegaban allí para recaudar dinero. Uno de ellos fue el rabino Yosef Kahenman, el Rov de Ponevizh y fundador de la Yeshivá de Ponevitzh en Bnei Brask y muchas otras yeshivot.

Un día, cuando el minian concluyó su Davenen de Shajaris y la gente se fue, Rav Kahenman se quedó y se sentó a estudiar. De repente, escuchó a alguien rezando con una emoción tremenda. Pensó, consecuentemente, que este hombre estaba pasando una situación extremadamente difícil y estaba volcando su corazón hacia Hashem, suplicando por su ayuda y misericordia.

Aunque estaba allí para recaudar dinero para sus instituciones, el Rav Kahenman sintió que era su deber ayudar a otro judío en apuros. Esperó casi una hora hasta que el individuo terminara su Davenen. Luego se acercó a él y le dijo: "Reb id, ¿cuánto dinero necesita para cubrir sus gastos inmediatos? Estoy dispuesto a ayudarlo."

El Yehudi lo miró desconcertado; no entendía de qué estaba hablando. Rav Kahenman vio su expresión perpleja y pensó que quizás el hombre estaba demasiado avergonzado como para revelar su situación. Así que continuó: "Escuché su sincera Tefilá a Hakadosh Baruj Hu y me dije a mí mismo: 'Hashem me envió a este shul hoy por una razón, y creo que la razón es para ayudarlo".

El Yehudi le respondió: "No entiendo. Boruj Hashem, mi familia está sana. Tengo najes de ellos y tenemos para cubrir los gastos. No necesito ninguna ayuda."

Rav Kahenman insistió: "Si eso es así, por favor, dígame, ¿por qué volcó su alma al Oibishter? Si todo está bien y no hay problemas, ¿por qué llorabas como un niño?!"

El Yehudi le respondió: “Hoy es un día feriado aquí en la ciudad, y mi lugar de trabajo está cerrado. Al ser que tengo algunas horas extra, simplemente decidí aprovecharlas y conectarme con Hashem, y la forma en que uno se conecta con Hashem es a través del Davenen."

Ese Yehudi era mi padre, Reb Meir Avtzon a'h, que trabajaba como mashgiaj en una planta empacadora de carne, salando y supervisando la carne.

domingo, 24 de marzo de 2019

Maise: Cómo influyó R' Biniomin Kletzker inconscientemente



A veces, durante sus viajes de negocios, Reb Binyomin le indicaba al chofer de la carreta que lo llevara a su próximo destino una o dos horas antes del amanecer. De esta forma, podrían llegar antes del amanecer y él podría rezar con un minian. Sin embargo, sucedió una vez que hubo un retraso en el camino, y poco antes del amanecer, Reb Binyomin se dio cuenta de que llegaría a su destino después de que el minian ya haya comenzado a rezar. Al darse cuenta de que no podría hacer Shajaris ese día con un minian, Reb Binyomin decidió ponerse su Talis y Tefilin tan pronto como fuera posible hacerlo y hacer Davenen a la hora adecuada.

Una vez que comenzó a hacer Davenen, decidió aprovechar la soledad y el largo viaje y emplear el tiempo para hacer un Davenen más reflexivo e intenso, como un Yehudi debe hacer Davenen. Aunque siempre rezaba lentamente y se extendía, ese día meditó mucho más acerca del significado de las palabras y le tomó más tiempo.

Cuando concluyó el Shemá y estaba a punto de comenzar Shemone Esre, la carreta seguía moviéndose. Si hubiera mirado por la ventana, se habría dado cuenta de que habían salido del bosque y estaban a punto de llegar a su destino. Sin embargo, al ser que estaba en medio de su Davenen, los pensamientos de Reb Binyomin estaban solo en su rezo, y no en sus alrededores, y se paró para recitar el Shemone Esre. Como el vagón se balanceaba de lado a lado y temía que perder el equilibrio pudiera afectar su concentración, Reb Binyomin se agarró de los dos rieles que estaban conectados al techo del vagón y comenzó el Davenen.

Unos minutos más tarde, el conductor de la carreta detuvo el carro en medio del mercado y fue a informarle a Reb Binyomin que habían llegado antes de que abriera el mercado. Al ver que Reb Binyomin estaba en medio del Shemone Esre, el chofer de la carreta no quiso interrumpirlo, por lo que decidió desatar los caballos y llevarlos al establo de la posada donde se alojarían. Pensó que apenas finalice su Davenen, se ocuparía de sus negocios de inmediato.

Poco después de que el conductor se fue con los caballos, el minian concluyó Shajaris y la gente del pueblo salieron del Shul y fueron a sus puestos en el mercado. Notaron allí la carreta sin caballos en medio del mercado y tenían curiosidad por saber por qué estaba allí, así que miraron dentro. Lo que vieron les era extraño a ellos que muchos se echaron a reír y ridiculizar. Había un hombre parado en la carreta con su Talis y Tefilin, aferrándose a los dos barrotes y ajeno a todo lo que estaba sucediendo. Estaba tan absorto en su Davenen que ni siquiera parecía escuchar lo que se decía a su alrededor.

Unos minutos más tarde, Reb Zalman Zezmer también salió del shul y pasó por el mercado en su camino a casa. Vio a la gran multitud parada alrededor, señalando el carruaje y hablando animadamente, así que se acercó para ver de qué se trataba la conmoción. A medida que se acercaba, Reb Zalman notó cómo la gente miraba la posición de Reb Binyomin, como si se tratara de lo más extraño y divertido que pudiera ocurrir.

¿Quién ha visto una persona así, sujetándose a dos barrotes y parada sola en una carreta, en medio del mercado, como si nada más existiera? ¡Debería hacer Davenen en el Shul, como todos los demás! Sus risas y burlas demostraban que ni se imaginaban que tal vez esta persona había comenzado a rezar mucho antes de llegar al mercado.

Reb Zalman también comenzó a observar el fenómeno, que era algo totalmente fuera de lo normal; sin embargo, su asombro vino desde una perspectiva de máxima admiración e inspiración. ¿Quién alguna vez vio a una persona tan absorta e inmersa en su Davenen a la medida tal que no exista nada más? ¡Lo único que existe es Aquel a quien está volcando su corazón en Tefilá! Este era un logro que nunca había observado, ni había creído posible. ¡No solo era algo para admirar, sino que sentía una cierta envidia, especialmente dado que la persona pudiera mantener ese nivel de concentración incluso en el tumulto de un mercado ocupado!

Después de unos minutos, los otros espectadores continuaron su camino hacia sus puestos y su trabajo, mientras que Reb Zalman esperó pacientemente hasta que este recién llegado concluyera su Davenen. Tomó mucho tiempo, lo que sólo hizo crecer la admiración de Reb Zalman; pero, finalmente, el hombre se quitó los Tefilín y comenzó a quitarse el Talis.

En ese momento, Reb Zalman se le acercó y, después de darle el usual "Sholom Aleijem", le preguntó con admiración: "¿Dónde aprende uno a rezar así? ¿Cómo puede uno hacer un Davenen al punto tal de estar ajeno a todo lo que lo rodea?

Sintiendo la sinceridad en la voz de Reb Zalman, Reb Binyomin le respondió: "Yunguerman, yunguerman, para aprender eso, uno debe ir a Liozna". Luego pasó a explicarle ciertos conceptos de avodat hatefilá (de qué se trata el Davenen).

Escuchar estos conceptos le abrió un mundo completamente nuevo a Reb Zalman, y su sed de experimentarlos era realmente fuerte. Reb Zalman luego le informó a su esposa y a su rico suegro que deseaba estudiar en otra ciudad y que se iría por un tiempo determinado. Como en aquellos días era bastante común que un erudito recién casado continuara y avanzara sus estudios en otra ciudad, le dieron su permiso de inmediato. Llegó a Liozna, y luego de un tiempo se convirtió en uno de los estudiantes y jasidim más destacados del Alter Rebe.

Reshimos Devorim p. 235 (Adaptado por R' Sh. D. Avtzon)

martes, 19 de marzo de 2019

Una perlita de Purim



El Jidushei Harim trae una explicación muy interesante a la declaración de la Guemará que "uno está obligado a embriagarse en Purim hasta no distinguir...": esta misma afirmación demuestra cuán grandioso es el día de Purim! ¡Un tremendo Et Ratzón!
Y explicó esto con una historia:

Sucedió cierta vez que se dirigieron al Baal Shem Tob implorándole que logre anular un terrible decreto que había recaído sobre cierta comunidad. El Baal Shem Tob hizo un Davenen, pero no veía respuesta... Más bien, veía que el decreto ya había sido sellado en el cielo. Les dijo: "queda sólo una opción. Viajen a tal aldea y diríjanse a fulano de tal, ¡su Brojé es una Broje y su promesa es efectivamente una promesa!"

Emprendieron el viaje, y preguntaron adónde vivía 'Rabí fulano' de tal. Enseguida estallaron las risas, ¿Rabí...?! Ni sabe leer! ¿Qué tienen uds. con él?
"Vinimos a pedirle una bendición para que seamos salvados." Las risas ya pasaron a burlas: "¿que los bendiga?! Ni hace Davenen!"
Ellos insistieron y dijeron: déjenos hablar con el, quién sabe...
"Pero cómo lograrán hablar con él? Está constantemente borracho, en ningún momento se lo ve sobrio como para entablar una conversación!! Al oír tal descripción estaban bastante aturdidos, más querían cumplir la petición de su Rebe! Así que les indicaron la dirección, y allí estaba, rodeado de otros borrachos, revolcándose en su vómito, completamente dormido. Esperaron hasta que se despierte. 

Apenas se despertó, extendió su mano hacia la botella, pero le dijeron: "Vinimos a recibir una Broje!"
Soltó unas carcajadas, entre bostezos y eructos, y no entendía que querían de él, quería seguir tomando! 
Vieron entonces de quién se trataba, y decidieron sacarle la botella diciéndole, "te la devolveremos, y te compraremos además otra botella de mucha mejor calidad, con la condición de que nos des una Broje!" Los bendijo profusamente, con tal de que le alcancen la bebida, y sólo entonces le trajeron una mejor botella que la tomó hasta quedarse dormido nuevamente...

Y, maravillosamente, la Broje se cumplió y el decreto pasó y fue revocado! Volvieron al Baal Shem Tob, totalmente asombrados, para que les explique que fue lo que pasaba.

El Baal Shem Tob les dijo: "Les explicaré. La verdad es que los Yehudim de aquella aldea tenían razón. Aquel Yehudi era un ignorante total, sin Torá ni Mitzvot, con una personalidad sumamente burda y grotezca y un Yetzer Hará muy fuerte. Cierto día oyó acerca de cierto lugar importante de Pritzut, un centro burlesco e inmoral, donde se le da allí rienda suelta al Yetzer Hará, sólo que cuesta una suma muy grande de dinero, además de lo que costaba el largo viaje. Fue juntando el monto durante un largo tiempo y emprendió viaje.

Durante el viaje, pasó por un pueblo y oyó de repente unos clamores y lamentos que rompían el corazón. Quiso averiguar de qué se trataba, y resultó que aquel pueblo debía grandes sumas y deudas al Paritz (señor feudal) por las tierras que utilizaban, y estaban hostigando a las autoridades Yehudim de esa zona. En ese mismo momento este hombre decidió encontrarse con el Paritz, y entregarle toda la suma de dinero que tenía consigo. Con eso se los liberó de inmediato a los prisioneros, y él perdió todo su sueño y posibilidad de lo que se esperaba disfrutar allí, tomando el camino de regreso a su casa.

Aquí culminó el Baal Shem Tov su relato y dijo: No podemos hacernos una idea del tremendo Nisayón que ese Yehudí atravesó y con éxito. Yendo a lo más bajo, y cediendo todo por esa Mitzvá provocó en el Shamaim toda una conmoción, quedando establecida su recompensa por eso, ¡que todo lo que decrete se cumpla!!
Enseguida el ángel acusador objetó: ¿Y si decreta que haya algún Tejiat Hametim? ¿Y si decreta que sea la Gueulá, que venga el Moshiaj, antes del tiempo previsto? ¿Cómo se le puede otorgar semejante 'arma' sin ninguna continencia, puede cambiar con eso todo el Seder Bereshit?!
Por lo que finalmente se decidió que esté arrojado a la bebida, que lo desconectaría del mundo, estará sumido en su Mashke, sin distinguir nada. De esa forma, no podrá aprovechar como se debe su aptitud.

El Jidushei Harim explicaba con esto: el día de Purim es un día sumamente elevado, más incluso que Yom Kipur, (Yom Kipur es sólamente KIpur, como Purim), y es un día de Et Ratzón más que Yom Kipur, la prueba de esto está que en Yom Kipur todos pedimos, pero no siempre se nos conceden los pedidos, mientras que en Purim, hay una Halajá: Todo aquel que extiende su mano y pide, debe dársele! Cada uno puede lograr todo lo que desee! Por lo que los Jajamim temieron que quizás pidan no como se debe o lo que uno verdaderamente necesite, y se ocuparon de 'honrarnos' el día con la Mitzvá de emborracharnos...

Sin embargo, aclara el Jidushei Harim: Bajo ninguna circunstancia diga alguien que hemos 'perdido' (o tenemos desaprovechado) debido la disposición de los Jajamim de emborracharse, etc
Parece ser, que Hashem tiene más Najes de que oigamos a nuestros Jajamim a que estemos solemnemente pidiendo por nuestro propias necesidades, etc, aún cuando podamos obtenerlas!!

lunes, 18 de marzo de 2019

Purim con el Rebe: Una presentación especial

Farbrenguens de Purim con el Rebe a través de los años. Editada y presentada por JEM para Purim 5779.

Una pizca de lo que era vivenciar Purim con el Rebe. Algo extraordinario.
(Ver en pantalla grande para mejor calidad)

domingo, 17 de marzo de 2019

Video: Un milagro de Purim



En este espectacular clip, el Rab. Iosef Itzjak Gurewitz recuerda el tiempo en que él fue enviado por el Rebe a estudiar en Israel. Cuando llegó el día de Purim, el Rebe pidió que ellos traigan la alegría de Purim a los soldados que estaban ubicados en diferentes bases de Israel, algunas de las cuales se encontraban en lugares peligrosos. Cuando se estaban acercando a su destino, se enfrentaron con un peligroso obstáculo, pero motivados por su misión y palabras del Rebe, ellos decidieron continuar adelante. Imagine el entusiasmo de ellos cuando el Rebe reconoció su entrega. Esta historia el Rebe la utilizó como una enseñanza para la vida.



Una anécdota de Purim





El Frierdiker Rebe le aconsejó a Reb Jatch'e (Yejezkel) Himelsthein que se convirtiera en el Rov de una determinada ciudad. Reb Jatshe, conocido por su humildad, respondió: "No soy digno de convertirme en un Rov, hay ciertas halajot (leyes) en Joshen Mishpat (asuntos monetarios), que no tengo al cien por ciento claridad y precisión en ellos."

El Frierdiker le respondió contándole la siguiente historia.


Era un Purim y, como en muchos pueblos y aldeas, alguien tomó vino o mashke de más, lo que lo llevó a quedarse profundamente dormido en un banco. Algunos de los niños/jóvenes lo vieron en su profundo sueño y quisieron divertirse un poco.

Así que consiguieron la ropa de un galaj (un cura o monje), (era un disfraz, siendo que era Purim, cuando muchas personas suelen disfrazarse) y se lo pusieron. Un rato más tarde, cuando esta persona se despertó, todavía estaba un poco embriagado y vio que llevaba puesto el atuendo de un galaj. Mirándose a sí mismo, se dijo "¡esto no puede ser!, No soy un sacerdote. Soy judío!"

Sin embargo, dado que su mente todavía estaba nublada, dijo luego: "Sin embargo, estoy usando las ropas de un sacerdote, eso significa que debo ser un galaj." Incapaz de llegar a una claridad concluyente, decidió que haría una prueba para ver si es un galaj  o no.

"Abriré el libro de los galajim y veré; Si puedo leerlo, eso significa que soy un galaj, si no puedo leerlo significa que no soy un galaj. Así que abrió uno de los libros y vio que no podía leer una palabra, ya que estaba escrita en un idioma que le era ajeno(es decir, en latín). En ese momento dijo: "definitivamente no soy un galaj!"

No obstante, un momento después, rechazó esa prueba: "si no soy galaj , ¡¿por qué estoy usando ropas de clérico?! Los únicos que usan estas vestimentas son los galajim." Por lo que llegó a la siguiente conclusión: "soy un galaj, y muy probablemente la mayoría de los sacerdotes tampoco saben leerlo. Después de todo, no soy un keilije (lisiado, incapacitado o deficiente), y si ellos pueden ser curas aunque no sepan leer esto, yo también puedo ser un galaj...

El Frierdiker Rebe concluyó: "Una moraleja que se debe aprender de esto es: No pienses que otros están más dotados de sabiduría que tú. Todos tienen sus deficiencias; solo aquellos que tienen éxito no permiten que las deficiencias los obstaculicen en su camino hacia el éxito."

***

Cuando le comenté esta historia a otros, me informaron que escucharon que el mensaje del Frierdiker Rebbe fue mucho más que eso, que había además un segundo mensaje.

El Frierdiker Rebe le estaba diciendo:  cuando se te asigna una responsabilidad o tarea que cumplir, es común que la 'humildad' de una persona argumente "soy incapaz de lograrlo". Entonces, el mensaje es: mira a los que sí han lograron cosas, ¿crees que inicialmente todos tenían los talentos para triunfar? No, no lo tenían, pero perseveraron y tuvieron éxito de todos modos. Así también, aún si es cierto que te falte claridad en ciertas halajot, con el tiempo y la perseverancia, obtendrás ese conocimiento.

El segundo punto es: Tu ropa o posición puede influir sobre tu comportamiento. Sin embargo, al mismo tiempo, uno debe tener en cuenta que las prendas por sí mismas no te convierten en esa persona. El Frierdiker Rebe quería que se convirtiera en un Rov, y al aceptar esa posición no se llenaría el vacío que él sentía que le faltaba. Tendría que esforzarse para llegar a esa posición.

sábado, 16 de marzo de 2019

9 de Adar Sheni: ¡América no es diferente!

El 9 de Adar (II), dia en el cual el Frierdiker Rebe llegó a América.


miércoles, 13 de marzo de 2019

Un hermoso Maise de Purim



Había una vez un Yehudi que vivía en una aldea próxima a Koznitz, y (desafortunadamente) era realmente pobre. Para Purim cierta vez fue a la gran ciudad, para oir la lectura de la Meguilá en un Beit Hakneset. El Baal Koré resultó ser nada menos que el Maguid de Koz'hnitz, y al oír semejante lectura este aldeano estaba colmado de alegría. Luego de la Tefilá se acercó a él el Tzadik y lo saludó, preguntándole: "¿Acaso tú no eres de tal aldea? ¿Por qué no me has traído un Mishloaj Manot?"
 
El hombre se quedó en silencio sin saber qué contestar, dado que no había ni pan en su casa. ¿Y de dónde sacaría un Mishloaj Manot para el Maguid? Más el Maguid continuó diciéndole: "Después de todo, hoy es Purim! Ven con nosotros y prueba un Lejaim!" 

El hombre fue a la casa del Maguid y allí le sirvieron lejaim y diferentes aperitivos y bocados. Debido a la alegría del mérito de poder estando tomando Lejaim con el Maguid y la Jebraye, se transformó totalmente, juntó coraje y se dirigió a la casa de uno de los adinerados de la ciudad que era comerciante de vinos.

"Purim Sameaj! Déme por favor una buena botella de vino, a crédito, y ciertamente le pagaré, y si no (llegara a pagarle), hoy es Purim!"

El comerciante aceptó y le dio una botella de vino. Luego fui a una tienda de comestibles y dijo de nuevo:
"Purim Sameaj! Déme dos o tres manzanas, y ciertamente se las pagaré, y si no llegara a pagar, hoy es Purim!!" 
También allí accedieron y así corrió, con gran alegría, de regreso a lo del Maguid, le entregó el vino y las manzanas, y le dijo: ¡Rebe, aquí le entrego un Mishloaj Manot!"
"Bien hecho!", respondió el Maguid, "y recuerda que cada Purim debes traerme un Mishloaj Manot."

Después, hizo el aldeano un razonamiento:
"Mis hijos están muertos de hambre y ni están viviendo una atmósfera de Purim. Iré a alegrarlos!

Fue nuevamente al comerciante de bebidas y le dijo de nuevo de la misma manera, le pidió que le diera una botella de Mashke a crédito, "y si no pagase, hoy es Purim!"
De allí se dirigió al panadero, pidiéndole del mismo modo, y de allí a otra tienda donde recibió algunos pescados salados, entonces corrió rápidamente a su casa.
"¡Purim Sameaj! Purim Sameaj!"

Su familia pensó que había enloquecido, no se lo imaginaban con esa alegría, pero él sirvió el pan y el pescado salado, junto con el Mashke delante de ellos y dijo:
"Coman, beban y pónganse contentos, que hoy es Purim!!"
No rechazaron la invitación... comieron, bebieron, él también se sumó a ellos, y después de haber bebido algunos vasos del Mashke, estaban llenos de alegría.
Asi que se levantaron, él junto a su esposa, y comenzaron a bailar, cantando "A freile'jn Purim!!, hoy es Purim!!" Así bailaron durante un buen rato, desbordando de alegría. De repente, escuchan golpes en la puerta, y el hombre la calma a su esposa: No temas, seguramente algún Goi quiere perturbar nuestra alegría de Purim.

Y seguían golpeando cada vez más fuerte, y la mujer dijo: "debe ser fulano el goi, que suele traernos papas, voy a abrirle."
Cuando abrió la puerta, entró el goi todo golpeado, herido y ensangrentado. Inmediatamente comenzaron a tratarlo, lo lavaron y le dieron una copa de vino y una barra de pan. Él comió y bebió, y dijo:
- "Me han revivido! estaba entre la vida y la muerte. Y pasó a contarles que su único hijo lo golpeó salvajemente y lo echó, y si no hubieran acudido en su ayuda, hubiera muerto de frío y dolor por las palizas."

Y después de eso les dijo:
"Dado que me han ayudado y salvado la vida, y por cuanto que mi hijo se volvió un asesino cruel, vengan conmigo al bosque que les mostraré un tesoro de mucho dinero que pensaba dárselo a mi hijo antes de mi muerte. Ahora se los revelaré y se los daré como regalo."

Y el hombre fue con el goi al bosque, y le mostró que debajo de cierto árbol había enterrado su tesoro. Unos días después, el gentil murió por las heridas y golpes que había recibido. El Yehudi fue al bosque, cavó en el lugar donde el gentil le mostró, encontró gran fortuna allí y se enriqueció.

Cada Purim iba a lo del Heiliker (sagrado) Maguid y le llevaba un hermoso Mishloaj Manot, con mucha satisfacción.


Fuente: Sipurei Jasidim

lunes, 11 de marzo de 2019

Limudei Jol - (continuación) - Meguilat Ester

Como continuación de las últimas anécdotas publicadas aquí relacionadas al Limudei Jol (estudios seculares) encontré apropiado citar este Vort, behashgajá Pratit, relacionado con Purim y la Meguilat Ester.


Alguien una vez intentó traer como prueba de la Meguilá que los Yehudim necesitan dedicarse a estudiar y aprender todas las ciencias y conocimientos seculares:

En la Meguilá, tenemos la historia de Bigtan y Zeresh, quienes estaban parados en el patio real debatiendo cómo matar al rey. Hablaban en un idioma extranjero y estaban seguros de que nadie más lo entendía. ¡Pero Mordejai era parte del Sanedrín, y necesitaba saber 70 idiomas! Debido a esto, fue que pudo transmitir el mensaje y salvar la vida del rey. ¡Esto es finalmente lo que salvó a todos los Yehudim!

¡Esa historia, dijo aquel hombre, demuestra que necesitamos conocer las lenguas y temas seculares!

En un Farbrenguen, el Rebe habló sobre lo que esta persona había dicho. El Rebe dijo que la verdad es justo lo contrario! Si en la historia de Purim, todos los Yehudim conocerían ciencias seculares, incluyendo todos los idiomas, ¡entonces Bigtan y Seresh nunca hubieran hablado en voz alta! Si supieran que todos los Yehudim sabían idiomas extranjeros, no habrían hablado en un lugar donde Mordejai pudiera escucharlos.

El hecho es que la mayoría de los Yehudim no sabían idiomas extranjeros. ¡La única razón por la que Mordejai lo conocía fue porque necesitaba para formar parte del Sanedrín! Solo conocía las materias seculares en función (y en lo que atañe a su) Avodat Hashem. Y por haberlo estudiado por las razones correctas, fue que se convirtió en parte del nes.

Esa es una importante lección para nosotros también:

Cuando estudiamos ciencias o materias seculares, debemos recordar por qué lo estamos haciendo. Puede que sea porque es parte del jinuj que nos están dando nuestros padres, para que podamos entender mejor una parte de la Torá, o cuando seamos mayores, podría servir para obtener parnasa para nuestras familias. ¡Pero cada cosa que aprendemos debe ser con el fin de ayudarnos a acercarnos más a Hashem!


(Fuente: Chitas for Kids, KidsChitas.org)

domingo, 10 de marzo de 2019

Snapshots - Anécdotas cortas con el Rebe - Davenen y el Shul

Número 1
El Mensaje del Rebe


"Durante el invierno de 5730 (1970)", relata el profesor Velvel Green, "Me invitaron a Londres, Reino Unido para participar en una investigación epidemiológica, mi campo de especialización. Bajo la directiva del Rebe, invertí también mucho tiempo para ayudar en la labor de Lubavitch allí.
“Un día, mientras estaba ocupado en el trabajo en el hospital, recibí una llamada urgente. "Hay una reunión de emergencia en la Lubavitch House", me dijeron. "Entró un mensaje importante del Rebe. Deja todo, ven ahora."
"Me tomé el tren. En la Lubavitch House, vi a todos los jasidim locales y simpatizantes de Lubavitch ya allí reunidos en silencio. Reb Bentzion Shemtov estaba sentado a la cabecera de la mesa, pero no emitió ningún sonido. Me dijeron que acababa de llegar de Nueva York con un mensaje importante para todo Anash.
"De repente, Reb Bentzion se levantó y anunció:"¡El Rebe dijo que el Davenen debe ser "lindo!"
“La reunión había terminado. A partir de ese día, todos hacían Davenen con un minian, no se charlaba en el medio, y los jazanim fueron elegidos
cuidadosamente; El davenen se revolucionó y se convirtió en uno "más lindo".

(Profesor Green Shalom Ubrajá, p. 153) 

jueves, 7 de marzo de 2019

Instantáneas - Anécdotas con el Rebe - Jinuj #16

Número 16

El Pidion Shvuim más grande


Reb Berl Futerfas relata:
“Mi padre, el mashpia Reb Mendel, dedicaba algunas semanas cada invierno para recaudar fondos para la judería rusa. Esta era una continuación de su trabajo allí: ayudar a Id'n b’gashmius.
“Un año se le pidió que recolectara también fondos para el Jeider de Oholei Torah. "Sin saber qué hacer, le preguntó al Rebe en un yejidus, y el Rebe lo alentó a recaudar fondos para el Jeider también."
"Mi padre todavía estaba preocupado. Le dijo al Rebe: "Pero alguien que dio mil dólares el año pasado dará lo mismo otra vez, para que se divida entre las dos causas. ¿Esto no quiere decir que las donaciones del Jeider están siendo a cuenta de los fondos de pidion shevuim (rescate de cautivos)?
"El Rebe lo miró a mi padre y le dijo: '¡Salvar niños de que estudien limudei jol es el mejor pidion shevuim!'"

(Tal como lo escuché de Reb Berl)

Fuente: Magazine Perspectives

***

Nota de Redacción de Jasidishe News:


De esta manera, culminamos Baruj Hashem la segunda serie de "Snapshots", "Instantáneas - Anécdotas cortas con el Rebe", esta vez el módulo de Jinuj. Seguiremos beez"H  con la próxima serie de anécdotas cortas, "Snapshots"- Anécdotas cortas con el Rebe - Davenen y el Shul.

Quiera Hashem permitirnos seguir difundiendo estas anécdotas y que logren inspirarnos para bien, y finalmente ver los frutos, con la llegada concreta del Moshiaj muy pronto.


***

Lista completa de "Anécdotas con el Rebe - Jinuj":

Número 1
Número 2