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jueves, 24 de octubre de 2019

10 cortas y fascinantes anécdotas acerca de Rabi Levi Itzjak MiBerditchev


Con motivo de su Yom Hilula, el 25 de Tishrei, presentamos 10 pequeñas anécdotas que demuestran su grandeza. Zejutó Yaguen Aleinu.


1. Rabi Levi Itzjak fue siempre un gran 'abogado' defensor de Israel cada vez que se le presentara la oportunidad, al analizar y reflexionar en que todo lo que sucediera a su alrededor. Es bien conocida la historia que pasaron cierta vez Rabi Levi Itzjak de Berdichev con sus jasidim junto a un Shul, y allí afuera había un carretero, aún envuelto en su Talit y Tefilin y aprovechaba durante su Tefila a reparar, engrasar su carreta mientras rezaba. Los jasisim comentaron: "Miren este carretero, ocupándose de su carreta, mientras tiene el Talit y los Tefilin puestos!" Cuando Rabi Levi Itzjak notó esto, dijo de inmediato: "Miren este carretero, incluso mientras repara su carro, está ocupado en Tefilá..."

2. Era siempre el famoso anfitrión de todas los invitados más sencillos e indignos que pasaran por su ciudad, junto a otras personas necesitadas y miserables. Un año, sus jasidim se le acercaron e intentaron disuadirlo, "Quizás se digne Rabeinu a tener esta vez "Ushpizin", invitados más distinguidos e ilustres." Rabi Levi Itzjak respondió con su más clásico estilo de Ahabat Israel: "Cuando vaya al Beit Din Shel Maala (la Corte Celestial), yo también solicitaré entrar y sentarme en la Sucá (hecha con el cuero de Leviatán) junto a todos los Tzadikim, y me pararán en la puerta diciéndome: 'Leivi Itzjok, ¿qué haces aquí?, ¿acaso no sabes que aquí es únicamente para los Tzadikim?', y entonces les diré: 'Cierto, no merezco entrar en este lugar solo apto para Tzadikim y no para personas como yo, pero yo también en mi sucá no hice distinción entre mis invitados y nunca eché a un Yehudi de mi Sucá, a todos recibí con alegría, y le abrí la puerta a cada judío tal como sea.''

Y continuó Rabi Levi Itzjak comentando a sus jasidim: "No es novedad invitar solo a "Ushpizin espirituales" tales como Avraham Itzjak Ya'akov, etc., invitados que no molestan, que no necesitan que los atiendan y que no ocupan espacio. ¿Ahora entienden? Así tendré yo, Leivi Itzjok, un argumento en el Olam Haemet (mundo venidero), para pedir que se me permita entrar y estar con los Tzadikim en el Gan Eden."

3. Rabi Levi Itzjak, con sus elevadas Midot, y especialmente en el tema del Ajdut, que tanto se ocupó de generar y traer en todo Am Israel, cada vez que se encontraba con algún "polvo de Majloket" enseñaba Rabi Levi Itzjak la siguiente Guezera Shavá: "Y amarás a Hashem Elokeja" "Y amarás a tu prójimo como a ti mismo". Así como el Ahabat hashem estaba compenetrado en su corazón "con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu fuerza", así también el amor a todas las personas era "con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu fuerza", a todos por igual, al pequeño como al grande, al pobre como al rico. Y un cariño y afecto especial le tenía a los Pshutei Am, la gente común y sencilla de Am Israel.

4. Un asistente de un peluquero pasó cierta vez en la víspera de Rosh Hashaná por la casa de Rabi Levi Itzjak de Berdychev. Iba este hombre con la cabeza descubierta, y su cabellera toda peinada y crecida. El Tzadik lo vio por la ventana y lo invitó a entrar. Luego, le preguntó: "¿Por qué tienes esa larga cabellera?", a lo que respondió: "Tengo constantemente trabajo con los ministros y los feudales (Poritzim) que vienen a cortarse el pelo, por lo que tengo que estar bien presentable ante ellos". El Tzadik le ofreció: "Te daré un Rojo (nombre de la moneda local) si te cortas esa cabellera; hay una prohibición (al tener así el pelo, como los gentiles, de) "Y en sus leyes no irán". El hombre se negó. "Bueno, te daré tres rojos para esto", y el hombre no aceptó. Siguió aumentando la cifra más y más, hasta que llegó a veinte Rojos, y el hombre con su respuesta tajante: "No." Entonces el Tzadik le dijo: "¡Si te cortas esos cabellos de inmediato, te aseguro un Olam Habá!" En ese instante, el joven se cortó todo el pelo.

El Tzadik de Berdichev se paró entonces y exclamó: "¡Ribono shel Olam! ¡Mira, qué grande y cuan fuerte es la Emuná de los Yehudim, incluso de los más simples! ¿Cuánto esfuerzo necesita realizar una persona así, y cuántas molestias, y horas de trabajo tiene que dedicar, para ganar un Rojo? Y ni hablar de veinte Rojos, que para alguien así es un monto enorme, y con todo eso, lo que no quiso hacer por veinte Rojos lo hizo por una porción en el Olam Habá, aunque nunca haya visto el Olam Habá con sus propios ojos..."

5. Era sumamente humilde y solía decir: "El mundo es bueno y no es malo, y tienes una clara señal de esto, que aguanta (y contiene en sí) a una persona como yo..."

6. Solía ​​decir: "Si no hubiese sido escrito en la Torá la Gaavá (orgullo), nunca hubiera creído que esta cualidad podía existir, ya que un hombre que es tierra y cenizas, una loza rota, ¿qué tiene para jactarse?!...

7. Sobre su manera de contemplar a cada judío, uno puede aprender de una de su explicaciones en su libro "Kedushat Leví", sobre lo que está dicho "Un hombre justo en su generación, con Elokim iba Noaj", a lo  que los sabios interpretaron algunos como alabanza y otros como crítica. Y explicaba: Hay dos tipos de Tzadikim, el hombre justo que es bueno para el cielo y bueno para con la gente, este es un hombre justo que no se contenta con que él mismo sirve a Hashem, sino que también acerca a los malvados a Avodat Hashem, como Abraham Abinu, que enseñaba y proclamaba la existencia de Hashem y atraía a la gente a ello.

Y hay un hombre justo que sirve a Hashem con gran Dveikut y entusiasmo, pero no se esfuerza por influir sobre los malvados a que sirvan a Hashem, y esto se alude en "Un hombre justo en su generación," pero "con Elokim iba Noaj"  él iba solo con Di-s. Solo, no iba entre su gente intentando acercarlos a que sirvan a Hashem, y así se explica lo que interpretan este Pasuk como una crítica, que si estaba en la generación de Abraham, que se ocupó de acercar a los Reshaim y hacerlos ingresar bajo las alas de la Shejiná, no hubiera sido nadie."

8. Es conocida su interpretación al texto del comienzo del Vidui (la confesión) de las Tefilot de Iom Kipur: "Estamos llenos de iniquidad y tú estás lleno de misericordia". Explicaba que el autor de esta oración nos colocó llenos de iniquidad y pecado frente a un Di-s lleno de misericordia. Aunque estamos llenos de iniquidad, pero qué implica esto, que valor tiene cuando, por otro lado, estás "lleno de misericordia", entonces no tienes límite ni fin, y si es así, ¿qué es nuestra iniquidad frente a la dimensión de Tu misericordia!?"

9. Su estilo y enfoque era de invertir las energías en el estudio de la Torá, y no en ayunos y flagelaciones. Nunca ordenó aumentar en ayunos o tormentos, excepto los ya dispuestos por la Halajá. En su opinión, la multiplicidad del tormento y los ayunos es una de las artimañas y trucos del Yetzer Hará: seducir al hombre de que aumente en ayunos y debilitar su mente, y así logrará quitarlo del estudio de Torá y de la Avodat Hashem.

10. Rabi Levi Itzjak veía en todo el Jesed de Hashem. Su libro 'Kedushat Levi' también explica el propósito de los sufrimientos. "Así es como el mundo se conduce, así como cuando una persona quiere hacer de un recipiente pequeño algo más grande, este recipiente necesita una rotura, así también Hashem quiere mandarle abundancia a una persona y ampliar sus Kelim, para hacerlos aún más grandes, y por eso envía problemas o una enfermedad J"v, que esto implica la rotura del recipiente para luego hacerlo más grande". Otra constatación que escribe allí es que los problemas y angustias son solo para beneficio del hombre, y en lugar de tratar de escapar del problema, tiene uno que buscar y encontrar qué quiere Hashem de él.

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